TAHULL: UN LUGAR EN EL VALLE DEL BOHÍ
Tahull se encuentra en el valle del Bohí, en los Pirineos de la provincia de Lérida. En este valle se encuentran otras iglesias con pinturas románicas. Además de San Clemente, donde se encuentra el Cristo de Tahull, encontramos otra iglesia: la de Santa María, que también tiene una representación de la Virgen María igualmente espectacular. Por último hay otras iglesias menos conocidas por el público y en apariencia menos importantes. Un ejemplo es la de San Juan.
De los estudios realizados se deduce que el Cristo de Tahull, parece ser que fueron dos artistas de origen italiano los que realizaron estas pinturas en el primer cuarto del siglo XII. Estas pinturas se encuentran en la actualidad en el Museo de Arte de Cataluña y constituyen la cima del románico catalán y una de las cumbres de la pintura medieval. Nuestro análisis se limita al ábside de la iglesia de San Clemente, donde está el episodio más genial: el famoso Cristo.
¿UNA PINTURA EN UN ÁBSIDE?
El ábside, en la cabecera de la iglesia, es el lugar más importante del templo cristiano. En el ábside se encuentra el altar. Hacia el ábside y el altar confluyen todas las miradas de los fieles que asisten a la celebración eucarística. Hacia el altar caminan todos los fieles por las naves en el momento de recibir la sagrada comunión.
El ábside tiene forma curva.
Podemos pensar que es una forma no adecuada o no fácil para pintar. Sin embargo los artistas románicos aprendieron a convertir esta curvatura en un recurso positivo que subrayaba la importancia del dibujo.
Por todas estas razones el ábside es el lugar clave de las representaciones iconográficas en el arte románico.
EL PROGRAMA ICONOGRÁFICO: LAS PINTURAS Y LAS IMÁGENES REPRESENTADAS
Las pinturas aparecen distribuidas en tres franjas pero actualmente solo podemos encontrar únicamente las dos primeras zonas:
- La superior, el cielo, con Cristo Majestad y los evangelistas.
- En el medio, la Iglesia con la Virgen y los apóstoles.
- La inferior, más estrecha, la Tierra, con símbolos y juegos de colores.
EL CENTRO ES CRISTO
Cristo está representado en la franja superior, como es habitual en el románico, dentro de la mandorla mística. Su cabeza, su mano derecha y sus pies sobresalen por encima de la mandorla. Está rodeado del Tetramorfos, de cuatro ángeles que presentan los signos de los cuatro evangelistas: Mateo (hombre), Marcos (león), Lucas (toro) y Juan (águila).
El Cristo en Majestad representado es la persona más importante de toda la composición y por eso la de mayor tamaño. Llaman la atención sus ojos penetrantes y los gestos de sus manos: alza la derecha en gesto de bendición y con la izquierda sostiene la Biblia en la que se lee: “Ego sum lux mundi” (Yo soy la luz del mundo).
Un nimbo con cruz rodea la cabeza de Cristo. Encima de sus hombros aparecen la primera y la última letra del alfabeto griego: α ω. Estas letras simbolizan el principio y el fin: Cristo como principio y fin de todas las cosas y de todo el saber humano. Es el Cristo del día del Juicio Final.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
Artísticamente hablando su figura y su rostro están diseñados con trazos fortísimos. La figura de Cristo es muy alargada y está diseñada con líneas ondulantes y curvas: las cejas, el arco de los ojos, los pliegues de la túnica o el contorno de la boca.
Estas pequeñas líneas curvas transmiten un deseo de mostrar a un Cristo vivo.
Los colores son de una gran riqueza: los azules intensos del manto, los rojos y carmines de las orlas del mismo, el blanco de la túnica y las maravillosas carnaciones (la carne de Cristo) con dos tonalidades. En los análisis realizados a los colores no se han encontrado restos de tierra de los alrededores. Quizás fueron traídos de Italia.
LA IGLESIA
En la franja de en medio, la Iglesia, podemos ver una solemne serie de Apóstoles y en medio de ellos aparece la Virgen. La Virgen hierática muestra un rostro larguísimo con ojos y rasgos faciales muy expresivos. La Virgen sostiene en sus manos una copa y los Apóstoles sostienen y muestran los evangelios. Todos estos personajes están situados debajo de arcos.
CONCLUSIÓN
Este vídeo que te ofrezco, habla de muchas de estas ideas que te he comentado. Puede servirte para contemplar en directo, en el lugar donde fue pintada, esta obra. Este Cristo es la obra cumbre de la pintura del arte románico, pero por encima de todo es una manifestación suprema de la divinidad.
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